Uno de los costados del puente El Bueno que comunica a Bucaramanga con Girón es hoy un piloto de investigación para el sector de la ingeniería y construcción.
Se trata de una especie de placahuella estilo lego que se instaló y que posee una resistencia mayor a la del cemento convencional. La pieza utiliza nanotubos de Carbono y se diseñó con una mezcla especial con la que se obtienen concretos de alta resistencia, en este caso los nanotubos reemplazan al acero.
En términos técnicos la idea de que funcione planteará toda una revolución para esta industria ya que no se tendrían que levantar placas, simplemente se tendería una red y su mantenimiento sería sencillo. La pieza se instaló con la aprobación de la Alcaldía de Bucaramanga, que apoyó la iniciativa para que su instalación adherida a uno de los contratos de mantenimiento de la vía sirviera para monitorear en tiempo real el comportamiento del material.
El Cluster de Construcción está conformado por 50 empresas de construcción, ingeniería, proveedores de bienes y servicios, universidades e instituciones como el Área Metropolitana de Bucaramanga y empresas de desarrollo tecnológico.
La iniciativa surgió en el seno del Cluster de Construcción liderado por la Cámara de Comercio de Bucaramanga, CCB, apoyado por varias instituciones académicas, entre ellas la Universidad Industrial de Santander, desde donde se ideó la pieza con acompañamiento de las empresas privadas que hacen parte de la iniciativa cluster. “Con el apoyo de varias instituciones y empresas estaríamos haciendo una tecnología que se podría extender a muchos otros sectores”, expresa la Cluster Manager, Maira Patricia Figueroa Landazábal.
Esta precisamente es hoy una de las iniciativas en las cuales se enfoca el cluster que cumple cuatro años de labores en Santander y que está proyectado para que exista un encadenamiento de diversas entidades, que no solo abarcan empresas del sector privado, sino del sector académico y entidades de diversa índole.
“Todo lo que hacemos en el Cluster es lo que no podemos hacer en nuestras empresas. Muchas veces, por nuestro día a día, nos descuidamos del entorno, de la política, de la visión de largo plazo. El cluster nos saca de eso y nos lleva a innovar y a trabajar en bloque con otras empresas y no individualmente en proyectos estratégicos para el sector, por ejemplo, sacamos adelante la implementación de la cartilla de la política de sostenibilidad, también estamos trabajando en proyectos emblemáticos para la ciudad como la creación la vivienda ideal”, explica el gerente de Sumas, Federico Gómez.
Este empresario se refiere a un proyecto piloto que arrancó apoyado por la Universidad Industrial de Santander, UIS, para la construcción de una vivienda piloto en la que se aplicarán elementos de economía circular y varias de las normativas dadas en construcción sostenible, especialmente en el tema de ahorro de agua y energía.
“Concluimos la etapa de diseño y construcción. Este será un laboratorio estilo prototipo y tendremos una vivienda tipo estrato 3 y 4. Es una unidad donde se pueden transformar los espacios, es algo muy modular tipo lego, con paneles solares, incorporación de temas de economía circular, materiales que han salido de residuos para mirar su resistencia, una casa totalmente sensorizada… si necesitamos probar una fachada pues la podemos poner, verificamos cómo las llevamos a las edificaciones y hacemos efectivo el tema de ahorro de agua”, explica la Cluster Manager.
Sin embargo, más allá de la sostenibilidad ambiental, el cluster busca que el sector sea sostenible desde todo punto de vista, teniendo en cuenta los altibajos económicos que ha sorteado el gremio y que dejan lecciones aprendidas, por lo que los empresarios insisten en hablar de valor total como una de las mega del cluster.
“Hablamos de valor total cuando podemos diseñar proyectos, construirlos, operarlos y administrarlos, lo que implica transformar la forma es que se diseñan los proyectos. También hablamos de proyectos de transformación y renovación de la ciudad, proyectamos tener uno o dos casos de éxito para renovar, por ejemplo, dos manzanas. También hablamos de que logremos simplificar nuestras compañías, con la prestación de servicios de otras empresas que nos ayuden a fortalecer el sector incorporando ofertas especializadas; la idea es tener lo mejor de lo mejor en toda la cadena. Al final, la internacionalización no es una meta, sino una consecuencia de ese fortalecimiento al que le estamos apostando presentando soluciones en equipo, a diferencia de otros actores que entrarían a competir individualmente”, puntualiza Federico Gómez, también presidente de la junta directiva de Camacol en Santander.