Una finca de 600 hectáreas ubicada en el distrito de Cartagena, a cinco kilómetros de la terminal de transporte de esa ciudad, es uno de los bienes que entraron a extinción de dominio y que pertenecían a la banda de Marcos de Jesús Figueroa García, alias ‘Marquitos Figueroa’, y de la que harían parte José ‘Ñeñe’ Hernández y Armando Gnecco, conocido como ‘Mandarino’.
Así lo informó la Fiscalía que añadió que además de esta gigantesca hacienda fueron detectadas un centenar de propiedades ubicadas en La Guajira, Magdalena, Bolívar, Cundinamarca y principalmente en Cesar y Santander, y cuya extensión total se calcula en 6000 hectáreas.
Junto con esos inmuebles fueron detectadas 11.949 cabezas de ganado. También fueron ocupadas cinco estaciones de combustible, 10 establecimientos de comercio, 11 sociedades y relacionadas con el comercio de hidrocarburos, 72 lujosos inmuebles e incautados 76 vehículos tipo campero y camiones.
Tanto los inmuebles como el ganado quedaron en manos de la Sociedad de Activos Especiales que ahora tendrá la potestad todo lo embargado cuyo monto se estima en 1,2 billones de pesos.
Sobre la finca en Cartagena se precisó que limitaba por un lado con la vía La Cordialidad y por el otro con la vía al mar.
“Los investigadores lograron determinar que dichos bienes habrían sido adquiridos con dineros provenientes de actividades ilegales, aparentemente relacionadas con el narcotráfico, y figurarían a nombre de Figueroa y varios de sus familiares. Otros inmuebles parecerían a nombre del ‘Ñeñe’ y de ‘Mandarino’”, explicó la Fiscalía.
